Hace 5 meses que sé de ti.
Hace 4 meses me diste una sorpresa la misma mañana que llegó mi abuela y mi tío Jorge.
Aunque ya sospechaba de tu existencia, no fue hasta hacer la prueba que corroboraban mis dudas. El mismo día vi a tu papá y fui con él a hacerme la prueba de sangre, la de deveritas y le conté en la noche cuando por fin llegaron los resultados virtuales: positivo.
Aún no escogemos un nombre, sé por el doctor que tienes una semanita extra de peso. Un humano gordito. Sabemos hace poco más de una semana que eres un niño. Sabemos también que eres fuerte pues das pataditas seguidas desde la semana 17. Puede que te haya sentido antes pero no con tanta intensidad.
Estoy feliz de saber que estás sanito y de cuerpo entero. Me alegra saber que estás bien y el alimento que te doy nos sirve a ambos. Tus tías y abuela materna se han resfriado por una semana completa y a nosotros no nos contagiaron. Las vitaminas están potentes. Por cierto, tengo muchas ganas de probar el limón en las comidas. Hasta en las bebidas. Y fruta cítrica. Y yogurt. Y últimamente, pescado. El mes pasado quería anticuchos. Casi no pruebo dulce, de hacerlo, es en poca cantidad. Por ahí a los 2 meses y medio probé a comer 3 postres diferentes y los terminé devolviendo a la hora. Volví a probar mi teoría con otro postre en otra ocasión y pasó lo mismo. Parece que el dulce nos cae fatal.
Además, el doc me dijo que me cuide de poder tener diabetes gestacional. O preclampsia (subida de presión). Me siento cada vez más consciente y segura de estar contigo. Tu papá es un gran hombre que me apoya y me conciente en demasía. Le gusta mucho que le valide sus puntos de vista y le diga lo mucho que lo amo. Cuando llegues también quiero enseñarte a darle mucho amor a papá. Nosotros no tuvimos la dicha de disfrutar a nuestros padres, solo a mamá. Esta vez será diferente, llegas a un mundo donde te estamos amando desde el vientre y todos esperamos tu llegada. Tómate el tiempo que necesites. Aquí vamos a estar para cuidarte, enseñarte y guiarte.
Aunque a veces no me dejas dormir, creo que podrás ser tan lindo y dormilón como tu papá y también tener las pilas bien puestas como yo. Un niño hermoso viene en camino, te amo mucho y puedes estar seguro en mis brazos. Voy a estar para ti siempre que me necesites. Que nos necesites. El mundo espera tu llegada. Eres una razón más para alegrarnos el día a día.
Con tu papá ya habíamos pensado en vivir juntos y casarnos algún día. A veces creo que me dio el anillo por apresurar las cosas, ya sabes que puede ponerse nervioso por si algo sale distinto a su mente. Y soy una experta en ponerlo nervioso desde que nos conocemos en el colegio.
Vas a aprender desde pequeño a ser valiente y noble como papá, a ser espontáneo y gracioso como mamá. A ser directo y justo. Y sobre todo, aprender a jugar y ser feliz. Sin preocuparte por tus padres, podemos cuidarte, tenlo por seguro. Haremos lo necesario para hacer realidad tus sueños con esfuerzo y dedicación. Tú también pon de tu parte, eres un espíritu libre.
Tu papá es el hombre de mis sueños, literalmente. Soñé mucho con él antes de volver a encontrarnos y retomar... y mejorar nuestra historia. Es quien me saca sonrisas de manera que nadie más lo ha hecho y eso que yo me río de todo. Me ofrece unos abrazos calentitos y unos besos cariñosos sin malicia. Es un placer estar a su lado compartiendo la misma habitación. Me encanta hacerlo reír y verlo disfrutar de la vida. Incluso cuando las cosas se tornan medio grises, me gusta ofrecerle calma y soporte. Mi amor por él estuvo en pausa muchos años, más lo que yo siento cuando estoy con él creo que nunca se fue del todo. No siento las mariposas cursis de las que hablan cuando te enamoras. Siento un fuego tibio en mi pecho cuando estoy a su lado. Seguro que cuando lo conozcas también lo sentirás y amarás estar en sus brazos. Son los mejores abrazos.
Tu papá tiene muchos deseos de conocerte. Se puso a llorar cuando se enteró que venías en camino, un tierno total. O cuando te vimos juntos en la segunda ecografía y escuchamos tus latidos. También la vez en que le di un reconocimiento de luces y le terminé mostrando tu primer babero escondido bajo mi casaca. Y también cuando nos enteramos hace poco que eras un niño. En todas esas ocasiones, he tenido la oportunidad de verlo sensible y humano. Me enamora cada día cuando lo veo expresando sus emociones. Estoy con él, no por obligación sino por elección. Una elección que tomo día a día y no me arrepiento de buscarlo de nuevo. He ganado más de lo que podría imaginar. Más que una pareja, he ganado un amigo, un confidente, un consuelo, un alivio, un motivador, un hombre sencillo, vulnerable y hermoso. De mente brillante y carismático. Posiblemente terco y excéntrico. Así y todo me gusta.
Pequeño, sé que puedo sentirme un poco nerviosa por tenerte dentro, ir al baño a casa rato no es mi parte favorita o tener hambre cada 2hrs. O sed todo el día. Lo que sí sé es que a la larga voy a extrañar llevarte dentro y poder mantenerte abrigado y cuidado desde mi ser. O compartir las emociones de cada día. Estoy segura que cuando me he reído mucho tú también te has sentido feliz, y cuando he llorado también te he causado alguna tristeza. Lo lamento. También soy humana en pleno aprendizaje. Gracias por escogerme como mamá y darme el lujo de llevarte en camino a la vida. Te va a encantar. Te amo pequeño pateador.
Ya pronto coordinaré con tu abuela paterna la pedida de mano "oficial" y tu baby shower. Vamos a darte la bienvenida de la mejor manera. Ya sabes, no se apresure y venga a su ritmo. Todo tiempo es perfecto. Gracias por existir y coexistir con nosotros!